Ensillar correctamente un caballo o una mula es una tarea fundamental para garantizar el bienestar y la comodidad del animal, así como la seguridad del jinete. Aquí te guiaremos paso a paso sobre cómo realizar este proceso de manera adecuada.
1. Preparación del ensilladero: Antes de comenzar, asegúrate de tener un ensilladero amplio y plano donde puedas trabajar cómodamente con el caballo o la mula. Este espacio debe contar con un lugar firme para sujetar al animal de su cabezal, garantizando así su estabilidad durante el proceso.
2. Verificación del estado de salud: Antes de ensillar, es importante verificar que el animal esté en buen estado de salud, sin laceraciones, cojeras ni dolores que puedan afectar su comodidad durante el trayecto.
3. Limpieza: Antes de colocar la montura, asegúrate de limpiar al caballo o la mula, retirando cualquier elemento externo que pueda causar incomodidad. Esto incluye suciedad, barro o restos de materiales que podrían afectar la piel del animal para no afectar el bienestar y la comodidad del caballo, ya que esto podría causar rechazo por la ensillada o la montura.
4. Colocación de los aperos: Comienza por colocar los aperos de cabeza, asegurándote de ajustar correctamente el cabezal y el freno con la presión correcta. En este punto es muy importante tener en cuenta la cantidad de crin donde queda el carga freno que es de 1 c.m. aproximado detrás de la base de sus orejas.
Lo ideal es que la crin este lo más baja posible, para que no haga un efecto amortiguador del freno y este pierda las presiones para las cuales fue diseñado.
5. Aperado del lomo Siempre se debe revisar que la alfombra este limpia y no tenga ningún objeto que incomode al caballo, la alfombra debe contar con buena tecnología para distribuir y amortiguar bien el peso de la silla y el jinete, y que sea lo más suave para la piel y el lomo.
Luego, se ponen los aperos de cabeza, primero se pone el cabezal de lujo amarrando el pisador con un nudo de desamarrado fácil, luego el freno de forma suave en la boca y después se ajusta la carga del freno, para organizarlo con la presión correcta.
Después, se toma la alfombra de la parte superior la que queda cerca a la cruz y se le presenta este objeto al animal dejando que lo huela, lo vea y con movimientos suaves se pone en su lomo y se acomoda de forma centrada, según el tamaño o la amplitud del lomo del caballo o mula se pone a partir de la cruz o 5 c.m. hacia adelante, cerca de su cuello.
De ahí, se organiza la silla (ojalá sea la silla para cada animal según el lomo y los bastos de la silla lo más ergonómico posible) la silla debe estar limpia y con todos sus accesorios según el fin si es cabalgata, exposición o según el deporte o trabajo que se practique.
La silla se pone por el lado izquierdo de atrás hacia adelante ubicándola 10 cm atrás de donde debe quedar para que sobre un espacio para acomodar los retrancos y la grupa.
La Grupa es un punto álgido a tener en cuenta en la ensillada. Cuando se ensilla siempre se debe tener precaución de los posteriores y por ubicarse con buena distancia de sus patas posteriores evitando incomodidad y la posibilidad de ocasionar algún accidente. Enrolla la cola para evitar que quede atrapada y ajusta la grupa de manera adecuada.
Ya habiendo posicionado la grupa se toma el conjunto de silla y alfombra y se mueven hacia adelante, dejando bien ubicada la silla, luego se pasa a ajustar la cincha.
6. Ajuste de la cincha y la pechera: Ajusta la cincha progresivamente, verificando que el animal esté relajado y cómodo. esta debe estar una mano atrás de sus patas anteriores hacia su barriga lo que llamamos “brazuelo”, y se ajusta de manera progresiva, finalmente se realiza un nudo en las amarradoras que sea fácil de soltar, para cuando se requiera hacerlo de forma urgente no se dificulte.
Habiendo ajustado la cincha bajo los estribos del siento de forma suave, se ajusta la pechera, que según su diseño debe ajustarse con una tolerancia de dos dedos para evitar presiones innecesarias en el animal.
7. Ubicación de la grupa: Al posicionar la grupa, mantén una distancia segura de las patas posteriores del animal para prevenir accidentes.
Después se deben ubicar la distancia de los arciones, una base para conocer la distancia al estribo es: poner la mano en donde empiezan los arciones y llevar el estribo hacia el sobaco. Esta distancia da la medida aproxima de cómo se debe arcionar.
Sigue estas recomendaciones para asegurar una experiencia de monta placentera tanto para ti como para tu compañero equino.
¿Cómo elegir el freno adecuado para tu caballo o mula?
En el mundo ecuestre, la elección del freno adecuado para tu caballo o mula es fundamental para garantizar una comunicación efectiva y respetuosa durante la monta. Es crucial tener conocimiento sobre cómo generar las palancas adecuadas con el nivel de sensibilidad apropiado y hacia dónde dirigir los movimientos. Acelerar este proceso puede resultar en rechazo por parte del caballo hacia diferentes tipos de frenos, por lo que la elección debe hacerse con cuidado y entendimiento.
En este artículo, exploraremos los aspectos clave a considerar :
1.Comprender la biomecánica detrás de los frenos: Es crucial tener en cuenta la anatomía de la boca del caballo, incluyendo los asientos, la lengua, los labios, las comisuras y el paladar. Esto nos permite seleccionar un freno que se ajuste comodamente y no cause molestias innecesarias al animal.
2. Considerar el freno como una herramienta de comunicación: El freno debe ser utilizado para comunicarnos con el caballo, no como un medio de castigo. Es importante evitar infligir dolor excesivo, ya que esto puede afectar negativamente la relación con nuestro equino y su sensibilidad bucal.
3. Adaptar el freno según la etapa de doma: Cada caballo es único, por lo que es fundamental adaptar el tipo de freno según la etapa de doma en la que se encuentre el animal. Comenzar con frenos suaves y utilizar falsas riendas puede ayudar al caballo a comprender y relacionar los movimientos que deseamos enseñarle.
4. Entender el conjunto de freno: El freno no se limita únicamente al dispositivo de hierro en la boca del caballo. Incluye componentes como la carga freno, la barbada y las riendas. Es importante tener en cuenta cómo estos elementos trabajan juntos para comunicarnos con el caballo de manera efectiva.
5. Utilizar una variedad de herramientas y técnicas de comunicación: La comunicación con el caballo va más allá del freno. Podemos utilizar nuestro cuerpo, postura, presión en las piernas y sonidos para comunicarnos eficazmente con el animal, reduciendo la dependencia de las presiones a través de la boca.
6. Respetar la individualidad del caballo: Cada caballo tiene sus propias necesidades y preferencias. Es importante respetar su individualidad al seleccionar el freno adecuado y ajustarlo de manera apropiada para garantizar su comodidad y receptividad.
En conclusión, la elección del freno adecuado para tu caballo o mula es un proceso que requiere comprensión, cuidado y respeto hacia el animal. Al comprender la biomecánica de su boca y utilizar técnicas de comunicación efectivas, podemos establecer una relación armoniosa y segura durante la monta.
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